Continúa refugiada en la jaula de puertas abiertas, aunque ha logrado dotar a su existencia de momentos especiales donde la rutina no tiene cabida. Después del suceso, trasladó el centro de operaciones (ordenador, prismáticos y cámara fotográfica) al lado de la ventana. Disfruta observando los acontecimientos en la calle o, a sus vecinos tras las rendijas de la persiana; pero el punto máximo de placer, lo obtiene en los días lluviosos cuando los paraguas juguetean de un lado para otro.
Por la tarde recibirá a unas amigas para una merienda especial. Como siempre, cotilleará opinará, conversará sobre las últimas noticias. Ellas están encantadas de escuchar las anécdotas de Ruperta. Ignoran que son historias vampirizadas a usuarios de redes sociales, blogs. o mientras juega al parchís online. Precisamente, en un chat contactó con Selene, una chica que se autofinancia la carrera haciendo reuniones de tuppersex.
Se da el visto bueno ante el espejo cuando se prueba uno de los vestidos comprados por Internet. Recibe al chico de la pastelería abriendo la puerta tras una línea imaginaria trazada a noventa centímetros de la salida que se corresponde con el ancho de la hoja.
A diferencia de otras veces, "las chicas" no llegaron en un reguero de minutos de diferencia. Cuando abrió la puerta, estaban todas de golpe, guapísimas y risueñas. Antes de que apareciera Selene les advirtió sobre la conveniencia de comprarle algún producto. Por fin apareció la estudiante que con desenvoltura desacostumbrada para ellas, las tuteaba y las animaba a preguntar cualquier duda. Abrió el pesado maletín y fue sacando todo tipo de artilugios que llamaba “juguetes”.
—Chicas, no os quedéis calladas –dijo sonriendo, mientras abría una caja de lencería.
—Mirad que ropa interior tan sexy. Vuestros maridos no podrán resistirse a ¡TACHÁN! —exclamó cual mago sacando el conejo de la chistera, en este caso un body-tanga de cuero en una mano y un látigo en la otra.
—¡Ese me lo quedo yo! —gritó Ruperta que, a sus cuarenta y cinco años continúa intacta.
El entusiasmo las fue desinhibiendo. Algunos chistes verdes y confesiones subidas de tono, hasta que una de las mujeres se arriesgó a revelar los detalles de cómo fingía con su aburrido marido; de ahí en adelante, el gallinero se explayó a sus anchas. Concluida la reunión, Selene apuntó los encargos de los que sacaría pingües beneficios. Ni en sueños pensó hacer una venta tan voluminosa. Agradecida, regaló a Ruperta la trilogía de “Las cincuenta sombras de Grey”, sin imaginar que la anfitriona conocía de memoria hasta el número de las página donde se encuentran los pasajes mas tórridos y morbosos.
Simulando una imprevista jaqueca despidió a "las chicas"y corrió al ordenador. Lleva tres semanas chateando con un caballero que le causa un cierto desasosiego. En su perfil, tiene cómo película preferida “Cantando bajo la Lluvia”. Ella, en el mismo lugar, “Los paraguas de Cherburgo” Mientras conectaba, tomó los prismáticos para observar al hombre que alquiló el segundo piso del edifciio de enfrente. Aunque cierra los visillos, su luz encendida permite a Ruperta observar cómo se desviste y se sienta a escribir en lo que parece un portátil. Al cabo de dos horas, cabizbajo, abandona el edificio.
En el mes de julio, en la tercera entrada del blog, “Amores de un roto para un descosido”, realtaba el encuentro entre dos caras de la moneda, voyeur-exhibicionista y cómo surgía algo entre ellos algo quizás llamado amor. Hoy me apeteció seguirles la pista y sabaer que ha sido de ellos…
ResponderEliminarLa entrada tiene mucha chispa, me ha recordado un poco a la pelicula " la ventana indiscreta".
ResponderEliminarEl tuppersex parece que está de moda jaja.
Me gusta mucho como escribes, y eres muy detallista describiendo.
La historia cojonuda!
Besos.
Claro Ohma, recuerda a la película de Hitchcock porque cualquier persona que esté impedida de salir a la calle, tiene su particular ventana. por donde mirar, vivir, soñar Muchas gracias. Besos
EliminarCreo que has solucionado con mucho ingenio el reto que tú misma te pusiste acerca del reencuentro de estos antiguos personajes.
ResponderEliminarMe ha gustado la frescura de la narración, así como su enlace con temas de la más rabiosa actualidad, como esas "sombras de Gray" que han hecho furor este verano.
Un abrazo, Pilar.
Pues sí, lo de Grey empezó como ebook, dado el éxito obtenido lo pasaron papel y parece que harán la peli. Muchas gracias Isabel. Un abrazo
EliminarIngeniosa solución para las situaciones de los personajes
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias Lapislazuli. Un abrazo
EliminarSerá ese hombre del segundo piso el de sus encuentros por el chat, no sé, ando lenta en interpretación, pero lo que es indiscutible es que me encanta tu narrativa.
ResponderEliminarAbrazos, Pilar.
jajaja! Alborada...a saber quien es quien. Abrazos
EliminarMuy buena historia. Me quedo con la intriga si el tipo del segundo piso es el mismo que chatea con Ruperta. Saludos
ResponderEliminarEduardo, toca echarle imaginación a la cosa. Saludos
Eliminar¡Cómo me divierte leerte! Ahora seguiré esperando más realidades de Ruperta, esa mujer que sólo conoceremos desde las historias de su piso. Cuarenta y cinco años e intacta... pero su fantasía en juego, y con las esperanzas puestas en el Tuppersex, en el chat y en el vecino, que sale cabizbajo.
ResponderEliminarUn beso enorme, Pilar.
Malena...pues como siga con la fantasía, no le arriendo las ganancias a la pobre. :-)) Un Besos, mi niña
EliminarUn bonita continuación de una bonita historia (que con gusto releí). Muy verosímil y muy vigente; no faltó Grey, las ventas de "accesorios" a domicilio, las redes, la portatil y las observaciones clandestinas. No creo que Ruperta sea la única; en cada ciudad, miles de Rupertas se disimulan tras correctas señoras, que no se han enterado de la normalidad de los deseos sexuales.
ResponderEliminarJames, cuanto me alegra que te tomaras la molestia de leer el comienzo de la historia. Muchas gracias. Un abrazo
EliminarHe vuelto a leer la historia completa y me he metido en ella hasta las pestañas. Situaciones reales y muy vivas se puede observar en las vidas cotidianas de mucha gente, hombre o mujeres, da igual. Lo que pasa que tú sabes ponerle a este relato un toque de suspense tremendo que hace que te enganches a la lectura.
ResponderEliminarEstá genial, y me gusta mucho como escribes Pilar.
Un abrazo enorme
MJ, no sé donde le pongo el toque pero,como dices, puede ser una historia real en un mundo globalizado como el que nos ha tocado vivir. Muchas gracias. Un abrazo grande para ti :)
ResponderEliminarmuy buena lectura con toques de humor sobre un tema tan real como la vida misma, esa ventana que despierta los deseos del un cuerpo intacto de un a mujer en plena madurez.
ResponderEliminarBESITOS.
Sí Ana, ¡pobrecilla! :) Muchas gracias. Besos
EliminarHola, Pilar
ResponderEliminarHe visto a Ruperta como en Ventana Indiscreta, mirando y remirando a su alrededor, viviendo la vida de los demás y olvidándose de la suya. Cuántas personas habrá como ella. Muchas. Y como bien dices, "viviendo historias vampirizadas".
Nunca he asistido a una reunión de tuppersex, pero deben ser muy divertidas. Tendré que apuntarme a alguna.
Besotes.
Hola María Eugenia, mucha más gente de la que creemos disfrutan como propias las vidas de ajenas...pero bueno, es inevitable. Muchas gracias y Besos
Eliminarque buen recurso este de fizgón
ResponderEliminarme ha encantado todo el relato
es ágil, ameno, y sobre todo chispeante
felicitaciones
a seguir con las partes que le siguen porque hay muy buena pasta
pd...muchas gracias por tus palabras y ánimos
decidí dejar el blog abierto pero con moderación
abrazooooo
Lichazul de antemano no lo sé, quizás algún día los recuerde y regrese en su busca :) Me alegra un montón que tomaras esta decisión y no la otra tan drástica. Un abrazo grande
EliminarUn retazo mas de la pura realidad de nuestra vida.Muchos personajes de nuestra vida cotidiana que detras de sus ojos esconden existencias curiosas. Muy respetables todos, incluso los voyeurs, cada uno se entretiene como puede o quiere... Un relato fresco y agil. Enhorabuena Pilar. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarSupongo que cada cuál tiene su intimidad, es un derecho que nadie puede romper...a saber que secretos inconfesables tenemos todos. Mucha gracias y un abrazo Eva.
EliminarMe ha gustado mucho tanto el enlace como esta entrada. Bonita historia, bien descrita y bien narrada.
ResponderEliminarUn abrazo, Pilar.
Muchas gracias Aurora. Me alegra que te gustara. Un abrazo
EliminarYa te lo he dicho varias veces Pilar, tu prosa serena y de ágil lectura me arrastra hasta terminar de leer casi sin respirar. Entrelazar estas situaciones que narras tan espléndidamente merece mi gran admiración y un ¡Olééé...! torero por la sonrisa, el gracejo, la seriedad y la facilidad, de unas situaciones tan reales, tan arriesgadas literariamente, tan oportunas, como las que eres capaz de crear.
ResponderEliminarMi más sincera enhorabuena, Pilar. No puedes ni imaginarte lo que aprendo leyéndote y repasándote una y otra vez. Gracias.
Un fuerte abrazo, querida Pilar.
Ay Antonio, tienes la capacidad de sacarme los colores ¡y de que manera! No me siento merecedora de tus elogios ni de tu humildad pero, como a nadie le amarga un dulce, no me queda más que brindarte este toro. :-)) Un abrazo grande
EliminarUna historia que se repite en varias ventanas de la ciudad pero expresada de una manera única. Da placer leerte.
ResponderEliminarUn beso grande
El placer es mutuo. Muchísimas gracias. Un bes enorme
EliminarEn apariencia la mujer es feliz con su vida. Me pregunto si llegará a darse cuenta del problema o prefiere ignorarlo.
ResponderEliminarPilar, un relato con enjundia. Bajo la chispa del humor usas todos los elementos de actualidad para dejarnos un cliché social.
¡Felicidades!
Creo que no tiene mayor importancia el problema, lo importante es que ella en su mundo está feliz. Muchas gracias! Saludos
EliminarJajaja, qué buena!!! Me gustó mucho, y me hizo gracia la reunión de tuppersex...
ResponderEliminarSaludos
Me alegro mucho guapísima! Muchas gracias. Saludos
ResponderEliminarA veces la soledad nos hace vivir vidas paralelas... y fingimos ser felices... y llevar una vida plena... ¡ains, soledad, soledad...!
ResponderEliminarAmeno tu relato y bien descrito.
Saludín. ;)
Hulma, no le veo mucho sentido pero es una realidad para mucha gente. Gracias y saludos
EliminarUn relato my bien logrado, amiga Pilar. Consigues ahondar en esa conflictividad interior del ser humano, sus neuras, secretos y locuras, llevándolo a un grado de realismo que es fácilmente entendible, porque los humanos, al igual que la protagonista de tu relato nos somos precisamente sencillos y lineales.
ResponderEliminarFelicidades
Un abrazo
FINA
Hola Fina, esto0y de acuerdo, somos humanamente imperfectos y, creo que por suerte, diferentes unos de otros. Muchas gracias. Un abrazo
EliminarTu capacidad de recrear la realidad de los sueños escondidos desde la fantasia, es increíble. Tus relatos tienen un toque surrealista y un dinamismo que de sobra merecen toda mi admiración.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mercedes, me sonroja el comentario viniendo de una artista de tu talla. Muchísmas gracias. Un abrazo
Eliminarfeliz fin de semana Pilar
ResponderEliminarmuchas gracias por tu huella
abrazooooo
Un millón de gracias por tus palabras.
ResponderEliminarTu relato es buenísimo.
Besos de luz.
Muchas gracias a ti Morgana. Besos de energía
EliminarEs que no hay nada como una reunión de tuppersex con un grupo de mujeres de cuarenta para arriba, son de lo màs divertido y lujurioso. Si encima les enseñas nuevos juguetes y disfraces ¿como no van a intentar usar lo que compran?
ResponderEliminarSigue hilvanando de la misma manera que tus cosidos son de colección.
Besos de gofio
Gloria, sip, eso dicen jajaja!. Muchas gracias por el ánimo sobre mis zurcidos. Besos
EliminarLas ventanas son cómplices de muchas historias intrigantes y de fantasías si freno.
ResponderEliminarUn abrazo, graciaS por visitarme.
Así es...ni te cuento, las rendijas u ojos de cerradura . Muchas gracias. Un abrazo
EliminarUNa mujer muy propia de estos tiempos informatizados, pero también deñ voyerismo, y la fisgonería erótica. Ruperta, un personaje encantador. UN abrazo. carlos
ResponderEliminarCarlos, en realidad podría ser de cualquier sexo. Me agrada que te guste Ruperta. Les tomé cariño, tanto a ella como a Fulgencio. Muchas gracias y un abrazo
ResponderEliminarCreo que sigo atrapado en tu relato... menudos ingredientes, sin duda da para una novela.
ResponderEliminarUn placer visitarte.
Besos almendrados ;)
Muchas gracias Teyalmendras. Un placer tu llegada. Besos
EliminarEsplendido relato. una suma de clips urbanos ingeniosos y verdaderos componiendo un Scrabel de palabras donde la imaginería se manifiesta a sus anchas.
ResponderEliminarUn relatazo, por así decirlo.
besos
Daniel, tal vez, no necesairamente deban ser urbanos, aunque hay muchas más posibilidades. Muchas gracias. Un abrazo
EliminarMe gusta muchísimo como escribes, consigues con los relatos que el lector este atento hasta el final sin perderse ni un ápice de las historias desde esa ventana, llamemosla, indiscreta.
ResponderEliminarMe ha encantado esa reunión de amigas que le da ese tono de simpatía.
Un placer leerte.
Elda, muchísimas gracias. Me alegra darte al bienvenida, así pues, el placer es mutuo :)
ResponderEliminarVaya Pilar, vuelvo por acá después de unos problemas técnicos y me encuentro con este relato. Aunque el cuento puede leerse sin la parte anterior, la de Ruperto, cuando se conoce la otra historia todo es más divertido. Lo interesante es que deja a un lado cierta tristeza completa. Por otro lado me gustó mucho como manejaste los temas de las redes sociales y lo que está de moda en cuanto a placer y erotismo, tanto en literatura como en vestuario. Me parece que aún, en este tiempo, falta una buena manera de manejar tales asuntos en literatura. Aunque, te repito, ha sido genial como lo he leído acá. También es bueno que ella sea la que mire, analice, tenga sus binoculares. Abrazos Pilar.
ResponderEliminarEskimal, me alegra se te hayan solucionado los problemas y, sí, el realato tiene sentido leido por separado o con la información de la otra parte. Muchas gracias. Un abrazo
EliminarMe repito desde la anterior entrega!!!
ResponderEliminarSigue buenísima la historia, es más, cada vez se pone más interesante
Y sólo te diré aunque suene repetitiva, ME ENCANTA tu estilo!!!
Doble felicitaciones!!!
Un besote y una linda semana ESCRITORA!
Gizela, que bueno que te guste! Muchísimas gracias. Un beso grande para ti también.
EliminarEn este burbujeante relato plasmas la evidencia de cómo buscamos mecanismos de defensa para mantener el equilibrio emocional. La protagonista, a su manera lo consigue y tú atrapándome desde las primeras líneas hasta el final. Me pica la curiosidad de leer Las sombras de Grey…jeje
ResponderEliminarEmpiezo la jornada con una gran sonrisa.
Besos
jajaja Genma, si te pica la curiosidad, ¡cede a ella, mujer! Gracias por pasarte y un beso enorme
ResponderEliminarExcelente trama, lo cuentas muy bien... parece una novela no? o me equivoco.
ResponderEliminarGracias por venir a mi sitio y por quedarte.
Me yo también por acá, en tu compañía.
Un beso
Muchs gracias Luján. Pues,...a mi no me lo parece, quizás porque la estructura nada tenga que ver..no se. Bienvenida y un beso
EliminarUna historia muy real, muy de nuestros días y es que, las ventanas dan mucho de sí en nuestras vidas.
ResponderEliminarGracias por dejar tu huella en mi blog para poder seguirte. Me ha encantado tu blog.
Un abrazo muy grande,
María Eva.
Eva, creo que desde siempre han sido un lugar idóneo para espiar. Muchas gracias a ti y un abrazo.
EliminarEscribo al lado de la ventana y, al leerte, no he podido evitar mirar hacia las del edificio de enfrente. Creo que hasta sacaré los prismáticos...
ResponderEliminarPues eso, que me gustó, se nota, no?
Un abrazo
jajaja Virgi, ya me contarás que descubres... Genial tu comentario. Un abrazo grande
ResponderEliminarGracias por visitar mi lugar y por las palabras que me has dejado.
ResponderEliminarYo no veo tristeza en esas palabras que escribí un amanecer en la playa. Al menos no recuerdo haberlas vivido así. Yo diría que son SOLEDADES: un estado íntimo y natural de la persona.
Un abrazo
Disculpa mi torpeza de haber malinterpretado tu estado íntimo de soledades. Un abrazo
ResponderEliminarA veces me sorprende ver cuánto hace que no paso por un blog... estoy superado.
ResponderEliminarPor suerte los escritos no tienen fecha de vencimiento. Un texto que sobre un fondo de realidad, dibuja una buena fantasía.
Un abrazo.
HD
Cada cuál se pasa cuando puede. Yo no soy tan importante así que, el blog no me supera. Lo disfruto a mi ritmo, tranquilita, sin agobios. Humberto te agradezco que hayas hecho un hueco para mi humilde espacio. Un abrazo
EliminarEsa parece ser la realidad actual, atisbos en vidas ajenas, amores virtuales encadenados no a besos sino a un click de distancia.
ResponderEliminarSaludos
Hola Malquerida, cierto lo que dices pero, es parte de la realidad de nuestro tiempo. Muchas gracias y bienvenida. Saludos
ResponderEliminarPilar Muy interesante esta entrada transmite un gran significado. Saludos desde Abstracción texto y Reflexión
ResponderEliminarBienvenido José Ramón. Muchas gracias por acercarte hasta mi espacio. Saludos
EliminarHola, a través de un comentario tuyo en mi blog,me has hecho adentrarme en tus escritos que me han gustado un montón.
ResponderEliminarHe enlazado con la historia para saber de qué iba lo de Fulgencio y he quedado aferrada a la idea de que entre este hombre "picador" y exhibicionista y la voyeur de Ruperta, transcurre una profunda corriente de soledad.
Sentir esa pesada carga,sobre todo si es involuntaria,puede abocar a la gente a comportarse de manera,digamos...peculiar cuanto menos.
:)
Por cierto,qué casualidad,yo acabo de comenzar la trilogía de Grey, de la que tanto me han hablado.
Ya veremos qué tal.
Encantada de conocerte.
Besos.
Hola Marineli. Cierto que ambos padecen una profunda soledad pero no la sufren, sino todo lo contrario, la disfrutan. Como bien dices, son peculiares :) Gracias y siéntete bienvenida. Un abrazo
ResponderEliminarMe gusta tu blog Pilar,y somos vecinas! de Las Palmas de Gran Canaria.Me atrajo el título de tu último post,el tuppersex,ya que también había colgado una entrada con el mismo tema, me gustó mucho leerte!
ResponderEliminarHola lunaroja. Muchas gracias porque te guste el aspecto de mi blog y leerme. Vaya... mira que hacer una entrada como la tuya...¿será que te plagié? :) Bienvenida y saludos
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