Sin saberlo previamente he caminado por las huellas de personas que nacieron en mi pensamiento. Jamás se encarnaron, pero sus luces y sus sombras yacen en algún lugar desconocido para favorecer el nacimiento de otras que aguardan impacientes. Tal vez…, quizás el sibilino proceso de la creación solo se acomoda cuando logramos rechazar aspiraciones, eligiendo el gozo de cabalgar a lomos de un potro de cartón.
© Pilar Cárdenes
Sin desasosiego, pensamientos libres y recuerdos. Muy bonito, Abrazos
ResponderEliminarSí, a veces se dan las circunstancias precisas para poder expresarlos. Muchas gracias.
EliminarUn abrazo.
Ese potro de cartón, quién sabe si acabará por determinar la vocación de jinete.
ResponderEliminarUn abrazo
Por supuesto! Por imaginar que no quede...
EliminarUn abraz
Hola Pilar. Que bonito escribes, no te hacen falta muchas líneas para expresar un pensamiento de enjundia.
ResponderEliminarEs cierto que hay huellas de personas que se quedan ahí y surgen de repente para favorecer una idea y plasmarla aunque luego su desarrollo no tenga nada que ver. Pero me encanta la frase final de tu relato porque es cierto.
Como siempre un placer leerte, y si es una novela mejor, :))).
Tenía a la vista en la derecha de tu página: Plantar un libro, escribir un hijo, y lo he estado buscando pensando que lo tenías escrito pero ya me di cuenta que era un relato, y ya lo he leído. Ya sabes que tengo y ya leí... Hábito Blanco, Metemsipcosis y Miel ácida, me encantaron.
¿Para cuando otra novela?, jajaja.
Un abrazo Pilar y buen fin de semana.
ResponderEliminarElda, de principio a fin qué alegría me da tu comentario. Y por si fuera poco dices públicamente que lees y te gustan mis novelas y eso me resulta estimulante. Muchas gracias! Normalmente lo hacen por otros medios como el Wsp.
Bueno, el caso es que sin tú saberlo, cuando leí tu poema: “Donde se bordan los sueños”, fue un chispazo que me abrió un camino para expresar lo dicho en este post.
Otra novela?😰 Te aseguró que no merece la pena. Por ahí tengo una medió abandonada...
Un abrazo grande y feliz semana.
Cabalgo a lomos de un toro salvaje de cartón que todas las noches mira a la luna y le envía un beso.
ResponderEliminarOtro para ti.
Jinete listo! He tardado años en descubrir el secreto. Seguiré tu ejemplo y le diré a mi potrillo que cada mañana se lo envíe al sol.
EliminarMe has sacado una buena risa.
Besos
Bonito escrito, me gusta, Pilar.
ResponderEliminarUn beso.
Muchas gracias, Mari Carmen :)
EliminarBesos
Lo bueno de los potros de cartón es que si te tiran no será tan duro el golpe ;)
ResponderEliminarUn saludo
Saludos, Malque!
EliminarQue bonito lo que has escrito Pilar. Pienso que hay recuerdos que siempre permanecen en nuestro corazón y muchas huellas jamás se borran y nos sirven de guía o inspiración cuando menos lo esperamos, solo sucede.
ResponderEliminarBeso y abrazo para ti.
Muchas gracias, Lady.
EliminarUn abrazo!